La madrugada de este domingo, mientras en el puerto de Veracruz se realizaba un enfrentamiento armado entre miembros del ejército y presuntos delincuentes, con un saldo oficial de dos muertos y un herido, el funcionario del estado responsable de la procuración de justicia, se encontraba en los Estados Unidos, luego de disfrutar la final del Super Bowl, en Arlington Texas.
Esa sí es una buena razón, por la que el Secretario de Seguridad Pública, general López Esquer entrevistado el lunes por la mañana por los reporteros, dijo que todavía no tenía información de los hechos y que estaba esperando que la Secretaría de la Defensa Nacional se la enviara.
Pues si bien es cierto, que en primera instancia, fue la Procuraduría Estatal la encargada de levantar los cuerpos y turnar a la Procuraduría General de la República para su indagatoria, el general no tenía información porque la encargada de procurar la justicia no se la había enviado.
Eso hablaría muy mal, de una falta de coordinación a nivel estatal, ya que en todos los enfrentamientos registrados en fechas recientes, las autoridades estatales salen a declarar de inmediato que se trató de un “operativo conjunto” con las fuerzas del orden federal.
Pero ahora vemos que no existe organización entre las autoridades estatales, menos con las federales, que son las que están haciendo el trabajo de patrullar y enfrentar a los delincuentes.
Como seguramente el funcionario estatal –quien acostumbra viajar a las finales de encuentros deportivos en Estados Unidos- negará el hecho de que viajó el pasado fin de semana, si alguien con autoridad, quiere corroborarlo, simplemente basta con que le pida que muestre su pasaporte y ahí se podrá confirmar cuando y cuantas veces ha viajado al extranjero, siendo funcionario, del gobierno próspero y del de la fidelidad.
La pregunta es: ¿tendría permiso de su jefe para irse a pasar el primer puente largo del año a los Estados Unidos?.
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