El tema obligado en la agenda veracruzana es el de las inundaciones, con la buena noticia de que los niveles de las inundaciones en la cuenca del Papaloapan y en Coatzacoalcos y Minatitlán han disminuidos durante las últimas horas, debido a que no se han registrado nuevas e intensas lluvias y que le bajaron al desfogue de las presas, pero la mala noticia es que esto es solo temporal, porque para el próximo jueves, ya se anuncias más lluvias por el disturbio tropical que se viene acercando del Golfo de México hacia costas veracruzanas.
El riesgo continúa latente en las zonas inundadas del sur del estado ante el acercamiento de un disturbio tropical que se desarrolla en las costas de Puerto Rico, el cual al impactar en el Golfo de México podría convertirse en ciclón tropical.
El jefe del proyecto Hidrometeorología del Organismo Cuenca-Golfo-Centro, José Llanos Arias, alertó de la situación pues -dijo- Yucatán y Veracruz son los estados de mayor riesgo. “Hemos estado monitoreando su comportamiento; es un peligro por la sola posición, en caso de seguir moviéndose puede afectar a la República Mexicana, a la Península de Yucatán y posteriormente al territorio veracruzano”.
La otra buena noticia es que finalmente, fueron liberados cien millones de pesos por parte del Fondo Nacional de Desastres (Fonden) al estado de Veracruz, para la reconstrucción de tramos carreteros que sufrieron daños y para ayudar a la población incomunicada.
El secretario de desarrollo social, Heriberto Félix Guerra, dio a conocer que en las dos cuencas se contará con más de 10 mil empleos temporales como una ayuda a la población y se entregarán despensas para 330 mil personas.
Ahora que la lluvia ha dado tregua a Veracruz y el nivel del agua del río Papaloapan tiende a disminuir, iniciarán los trabajos de sanidad para evitar brotes de enfermedades ahora que los tlacotalpeños regresan a sus viviendas.
Pero como dirían en el beisbol…esto no se acaba hasta que se acaba, y esto en realidad es un suspiro dentro del problema, porque aunque los niveles del agua han bajado, todavía persiste la amenaza de más lluvias y la necesidad de seguir desfogando las presas, con lo que las aguas volverán a subir.
De todas formas, falta mucho aún por hacer, pues aunque las aguas desciendan, hay que realizar labores de limpieza en las viviendas y tratar de reponer los muebles dañados.
La temporada de lluvias todavía va para largo, porque lo que bien pudiera ser, que al actual gobernador Fidel Herrera Beltrán le gane el tiempo y no concluya con la reparación de los daños en infraestructura, afectaciones al campo y a las viviendas de los miles –reales- de veracruzanos afectados. No estaría de más, que el próximo gobernador virtual, Javier Duarte de Ochoa, además de pasearse por las calles y café de Xalapa con sus futuros colaboradores, empezara a “calentar” a un costado de la cancha para entrarle al partido, aunque sea en los últimos momentos…
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