“Debemos mucho a Maquiavelo y a quienes nos han mostrado lo que los hombres hacen, y no lo que deberían hacer.”
BACON, Francis Barón de Verulam
Xalapa, Veracruz.- Resulta que la negativa de policías municipales a recibir para su consignación a un civil que al parecer había sido detenido y golpeado por miembros del ejercito en la zona residencial de Las Animas, se complicó más de lo debido, entre otras cuestiones por una deficiente comunicación entre las autoridades que intervinieron.
El hecho, sirvió para evidenciar una serie de irregularidades, las cuales tuvieron como escenario principal el cuartel policial de San José, cuando cerca de 100 policías estatales se enfrentaron a golpes con guardaespaldas del secretario de Seguridad Pública, Sergio López Esquer, esto durante un evento de entrega de reconocimientos a los efectivos por haber realizado un curso en “Derechos Humanos”.
Pero precisamente por tener conocimiento de los Derechos Humanos, que se deben aplicar en el caso de una detención, fue que los policías que fueron detenidos y consignados a Pacho Viejo, se negaron a recibir al supuesto delincuente, ya que hay una norma de que “Quien interviene consigna” y ¿cómo iban a consignar a un sujeto que iba con claras señas de haber sido golpeado y torturado?.
Todo esto en el marco del operativo de “Mexico Seguro” en el que el ejercito ha tenido que entrar a patrullas colonias y fraccionamientos de la capital del estado, hasta ahora sin mayores o mejores resultados, con excepción del incidente de las Animas.
Por lo pronto, para demostrar que no se permitirán insubordinaciones, los policías que protagonizaron la trifulca registrada en el cuartel San José entre policías estatales que demandaban la liberación de sus compañeros –a quien el juez de Pacho Viejo pretendía cobrar 50 mil pesos de fianza- y guardias personales del secretario de Seguridad Pública, Sergio López Esquer, fueron cesados de su cargos.
Agentes intermunicipales se negaron a recibir a una persona arrestada por soldados que presentaba huellas de tortura, por lo que fueron detenidos. Sus compañeros arman gresca contra el secretario de Seguridad Pública, Sergio López
Los dos elementos de la Policía Intermunicipal Xalapa-Banderilla-Tlalnehuayocan, fueron liberados tras el pago de una fianza de 10 mil pesos, luego de estar acusados del presunto delito de incumplimiento de un deber legal por negarse a recibir a un detenido con huellas de tortura que les presentaban integrantes del Ejército Mexicano.
La liberación de los dos policías intermunicipales -Luis Vázquez y Óscar Andrés Castaño- se registró horas después que decenas de agentes agredieron físicamente -durante un evento oficial celebrado la mañana de ayer- al secretario de Seguridad Pública de Veracruz, el General Sergio López Esquer.
Tras el zafarrancho, el Juez en turno del penal de Pacho Viejo bajó la fianza de 50 mil a 10 mil pesos por cada uno de los policías, dinero que fue recolectado por sus familiares y agentes estatales.
Los dos policías buscarán ser reinstalados en sus funciones, pues consideran que no cometieron delito alguno al negarse a recibir de manos de militares que aplican el operativo México Seguro a un presunto delincuente que presentaba golpes.
La mañana de ayer lunes, elementos de la Policía Intermunicipal Xalapa-Banderilla-Tlalnehuayocan, agredieron físicamente al Secretario de Seguridad en protesta por la detención de sus dos compañeros.
Durante un evento oficial que encabezó el funcionario estatal, decenas de agentes se le abalanzaron, golpearon a cuatro de sus escoltas y a gritos exigieron solución y la liberación de sus compañeros.
El funcionario fue resguardado en el comedor, donde inició negociaciones con los inconformes.
Minutos después de haberse registrado la gresca, cinco militares vestidos de civil y portando armas largas -escoltas también del Secretario de Seguridad- intentaron ingresar al Cuartel "San José", sin embargo fueron sometidos por decenas de policías estatales, quienes lo desarmaron y los recluyeron en los separos.
Por su parte, el gobernador Fidel Herrera Beltrán declaró a los reporteros que el gobierno de Veracruz no cederá hasta contar con buenas policías y si se registran actos de insubordinación se registrarán cuando se busque depurar los cuerpos y lograr contar con elementos “disciplinados, rigurosos, honrados y cumplidores”.
Pero si precisamente, por ser rigurosos con la aplicación de la ley, honrados y cumplidores, los policías fueron encarcelados, por no aceptar al presunto delincuente que había sido golpeado por los militares.
¿Entonces, en que quedamos?
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