El fuego no es un juego

Empezaron a transmitirse por los canales de televisión en Veracruz, los anuncios de la campaña de publicidad del gobierno del estado, para prevenir los incendios forestales, como los que se registraron hace ya algunos días en la zona del cofre de Perote y el pico de Orizaba que consumieron decenas de hectáreas de bosque y arbustos, en los promocionales se concluye con el mensaje de que “el fuego no es un juego”.

En principio habría que considerar que efectivamente, el fuego no es un juego, como quedó evidenciado hace unos días, en que se tuvo que combatir las llamas, que afortunadamente no cobraron víctimas.

Durante el promocional se hacen algunas recomendaciones precisamente para evitar los incendios forestales.

Hasta aquí todo va bien, pero resulta contradictorio que en el comercial que debieron de supervisar o intervenir varias dependencias estatales como son Protección Civil, Comunicación Social, la Secretaría de Turismo, la Secretaría de Educación y la recién creada Secretaría del Medio Ambiente, por mencionar algunas, presente algunas inconsistencias.

Para empezar, un asunto que es de mucha seriedad, se presenta con fondo de dibujos de caricaturas de personajes de animalitos, lo que le resta credibilidad.

Si precisamente se está diciendo a la población veracruzana, que “el fuego no es un juego”, pareciera que en el fondo del mensaje, se está “jugando a producir un promocional”, que seguramente debe de haber costado un buen billete.

En lugar de utilizar dibujos fijos, ni siquiera animados, se pudieron usar fotos de los incendios forestales, que si ilustran y muestra la gravedad del problema.

Pareciera como si se tratara de un trabajo de estudiantes de comunicación, que están aprendiendo a utilizar los programas de diseño y no de profesionales.

Son invaluables los recursos que están en “juego” en el tema de los incendios forestales, desde la pérdida de bosques y arbustos, hasta la vida de los brigadistas que acuden a apagar los incendios.

Así es que no se vale, que los encargados de producir esos promocionales contra incendios forestales, pareciera que están jugando o aprendiendo a elaborar los anuncios, en lugar de tratarlos con la importancia que tienen.

Habría que empezar por decirles que “la comunicación social es un asunto serio, no es un juego”.